Mantén el ambiente de tu hogar limpio y saludable con estos 4 consejos

Un hogar saludable y libre de contaminantes ayuda a mantener la salud física y emocional de los usuarios. Los espacios también influyen en los estados de ánimo y la capacidad para realizar tareas físicas e intelectuales. El tipo de piso es fundamental para conseguir un lugar limpio y seguro.

Las personas pasamos la mayor parte del día en interiores. Ya sea en espacios educativos, nuestros hogares, zonas recreativas o áreas de trabajo, nuestras vidas transcurren, sobre todo, en lugares cerrados dentro de los que nos resguardamos. Por ello es importante mantenerlos limpios y seguros.

¿Por qué es importante mantener un interior saludable y libre de contaminantes?

Entre los espacios en los que nos desarrollamos y convivimos, nuestro hogar es el más importante por la cantidad de tiempo que pasamos y las actividades que realizamos.

Desde la crianza de los hijos, el descanso, la convivencia con familiares y amigos, hasta la adaptación de nuestra casa como lugar de trabajo, el hecho es que un hogar higiénico y libre de contaminantes es fundamental para llevar una vida plena.

Los diversos agentes nocivos ocasionan distintas afectaciones a la salud de las personas; algunas de estas anomalías pueden presentarse mucho tiempo después. Entre los problemas más comunes encontramos:

• Desarrollo de alergias
• Enfermedades respiratorias
• Problemas cardiovasculares
• Infecciones
• Diferentes tipos de cáncer

Tipos de contaminantes en el hogar

Existen diversos factores contaminantes que encontramos en los hogares. Entre los más comunes están los siguientes.

Biológicos

En el aire que respiramos a diario en nuestros hogares, oficinas, escuelas, etc., se encuentran microorganismos potencialmente dañinos para la salud. Lo habitan bacterias, ácaros, moho, polen, entre otros.

Químicos

Muchos de los objetos que a diario utilizamos en nuestro hogar, por ejemplo, perfumes, aromatizantes, productos de limpieza e higiene personal, liberan compuestos químicos que deterioran nuestra salud o causan enfermedades cuando alcanzan ciertos niveles de concentración.

Residuos de combustión

Diversas actividades que implican la combustión fósil generan gases contaminantes, como el monóxido de carbono, que afectan considerablemente la calidad del aire en interiores.

Las estufas que funcionan con gas LP o natural, calefacción que emplea el mismo combustible o hábitos, como fumar, deterioran considerablemente las condiciones del ambiente.

Materiales de construcción

Los materiales de construcción y acabados contienen diversas partículas que, al ser liberadas al ambiente, ocasionan daños a la salud en determinados niveles de concentración.

El asbesto, las fibras de vidrio o compuestos empleados durante la fabricación de acabados, como el benceno o formaldehídos ocasionan daños a las vías respiratorias y son considerados agentes cancerígenos.

¿Cómo mantener un ambiente saludable en interiores?

Mantener el aire libre de partículas nocivas mejora la calidad de vida y previene enfermedades; además, en lugares de trabajo, aumenta la productividad del personal.

Si bien, es prácticamente imposible mantener un espacio totalmente libre de partículas contaminantes, sí podemos evitar los agentes más peligrosos y eliminar altas concentraciones de sustancias nocivas. Para lograrlo, sigue los siguientes consejos:

1. Limpieza e higiene constantes

Las tareas de limpieza eliminan una gran parte de las esporas, bacterias y plagas que perjudican la salud. También son importantes para retirar polvo y residuos tóxicos.

Un espacio con poca higiene es un potencial foco de infección. En los hogares la concentración de ácaros puede aumentar hasta generar molestias entre los usuarios. Además, proliferan insectos transmisores de bacterias peligrosas, por ejemplo, las pulgas o cucarachas.

Existen distintos productos de limpieza que eliminan plagas y bacterias, pero su implementación debe ser cuidadosa porque algunos limpiadores contienen sustancias que, en grandes cantidades, ocasionan daños a la salud.

2. Iluminación y ventilación adecuadas

Asegúrate de proveer suficiente luz natural a tu hogar y una adecuada circulación del aire. La ventilación ayuda a dispersar partículas nocivas, microorganismos y gases contaminantes. Además, renovar constantemente el aire interior conserva los niveles de oxígeno, lo que beneficia la concentración y las actividades físicas.

Por otra parte, una adecuada iluminación natural disminuye los niveles de humedad y evita la proliferación de moho y todo tipo de plagas que transportan bacterias nocivas. También ayuda a mantener la salud y mejora el estado de ánimo.

3. Materiales y acabados seguros

Elegir materiales de construcción seguros y libres de toxinas es fundamental para conservar un hogar saludable.

Los materiales afectan la calidad del aire en interiores de dos formas:

Biológico: existen acabados que almacenan bacterias en su estructura y contribuyen a la proliferación de moho y plagas. Ambos casos pueden ocasionar infecciones respiratorias en las personas.

Por ello, es importante utilizar materiales de acabados que: en primer lugar, favorezcan las tareas de limpieza. En segundo lugar, que eviten la reproducción y propagación de insectos y microorganismos nocivos para la salud.

Químico: casi todos los materiales de construcción y acabados contienen compuestos químicos que deterioran la salud de las personas. Sin embargo, eso no significa que no sean seguros.

La diferencia radica en que algunos productos liberan sustancias nocivas para la salud, como el asbesto. Mientras que otros tienen una estructura resistente que no se degrada con factores ambientales, por lo que no representan ningún riesgo.

El piso es un factor que influye directamente en la calidad del aire en interiores. Los materiales de fabricación y la calidad de los acabados pueden degradar o mejorar las condiciones ambientales en determinado espacio.

4. Elige un piso seguro y libre de sustancias nocivas

Los Pisos Lalur son eficientes para mantener la calidad del aire. Están compuestos por materiales seguros e higiénicos. No liberan partículas que deterioran la salud de las personas ni al medio ambiente. Su capa protectora es antibacteriana, ya que evita la proliferación de bacterias, moho y plagas. Por si fuera poco, las tareas de limpieza son sencillas y no requieren líquidos limpiadores.

Además, proporcionan otros beneficios para mejorar la calidad de vida:

• Disminuyen el ruido entre habitaciones
• Mantienen una superficie cálida
• No absorben líquidos
• Su instalación no genera residuos tóxicos

Mantener un ambiente limpio y seguro en tu hogar, área comercial u oficina favorece la salud física y emocional de tu familia y usuarios. De ahí la importancia de realizar constantemente tareas de limpieza, cuidar las condiciones de humedad, iluminación y ventilación; así como asegurarte de emplear solamente acabados de construcción libres de sustancias nocivas.